Creada en 1962 en los entonces seis países de la CEE en un congreso celebrado en San Remo, la Asociación de Periodistas Europeos ha cumplido 60 años. La AEJ fue una iniciativa de algunos periodistas destacados de Italia, Alemania y Francia, y su inspiración reflejaba el estado de ánimo de la época: sencillamente Europa, la clara necesidad de integración democrática y la convicción de que una prensa libre era fundamental para construir un continente habitable en la posguerra. «La idea europea es demasiado importante para dejarla sólo en manos de los políticos y los diplomáticos», en palabras de uno de los fundadores.
La mayoría de las actividades de la AEJ son organizadas por nuestras secciones a nivel nacional (como la Comunidad Europea de hace 60 años). Pero la asociación internacional promueve activamente los vínculos entre periodistas individuales para intercambiar contactos, información e ideas. Y hay contactos regulares con la Comisión y el Parlamento Europeos, así como con el Consejo de Europa en Estrasburgo y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) con sede en Viena.
Actualmente hay más de 15 secciones en los países miembros del Consejo de Europa. Los cerca de 700 miembros proceden de un amplio espectro de trabajadores de los medios de comunicación y colaboradores autónomos de la televisión, la radio, los periódicos nacionales, regionales y especializados, y cada vez más de los nuevos medios digitales.
La afiliación a cada sección está abierta a todos los periodistas, incluidos los representantes de medios de comunicación extranjeros establecidos en el país.
Inscrita en la legislación belga, la AEJ es una organización internacional independiente y sin ánimo de lucro, sin vínculos partidistas ni sindicales. Tiene estatus de ONG ante la UNESCO y el Consejo de Europa. Es miembro del Movimiento Europeo y mantiene una relación de trabajo con el Representante de la OSCE para la Libertad de los Medios de Comunicación.
La libertad de los medios de comunicación en Europa es un tema central. El ex periodista de la BBC William Horsley fue elegido Representante de la AEJ para la Libertad de los Medios de Comunicación por nuestra Asamblea General hace unos 10 años. Fue uno de los fundadores de la Plataforma para la Seguridad de los Periodistas del Consejo de Europa, para apoyar a los colegas amenazados por el mero hecho de hacer su trabajo.
Sólo este año se han iniciado 241 alertas en 37 países. Los gobiernos están obligados a responder; como mínimo es una carga, especialmente para los regímenes autoritarios. Cada año, la mayoría de las secciones de la AEJ celebran el Día Mundial de la Libertad de Prensa (3 de mayo), organizando actos y actividades especiales.
Bajo el mandato del presidente de la AEJ, Athanase Papandropoulos, se celebraron varios congresos históricos y se creó el Premio Europeo de Periodismo. Bajo el mandato del Secretario General de la AEJ, el español Miguel Ángel Aguilar, y de su sucesor, el holandés Peter Kramer, se organizaron eventos especiales, entre ellos viajes informativos a Turquía, Estonia, Linz (Austria), Capital Europea de la Cultura 2008, y la Exposición Universal de Zaragoza.
Nuestra sección española -con más de 120 miembros, la más grande- es muy activa y presentó su programa anual en un informe récord de 102 páginas. Miguel Ángel Aguilar fue un dinámico Secretario General Internacional y tras él el reconocido periodista Diego Carcedo se convirtió en Presidente Internacional. Desde 2011, Javier Fernández Arribas es vicepresidente. Ahora fue reelegido en Eretria, Grecia.
Bajo el mandato de la presidenta irlandesa de la AEJ, Eileen Dunne, se introdujeron nuevos estatutos en 2013, con una junta directiva más reducida que sustituyó al anquilosado comité ejecutivo anterior.
Como presidente internacional de la AEJ (2014-2021), mi tarea consistió en volver a poner a nuestra asociación en contacto con las instituciones europeas, organizando varios seminarios de prensa en colaboración con el Parlamento Europeo.
Entre nuestros debates se encontraban las consecuencias del Brexit, los objetivos del presupuesto europeo, las tareas de la Comisión Europea, la lucha contra las fake news y, en junio de 2022, las consecuencias de la guerra de Putin contra Ucrania. Mi agradecimiento a todos los colegas que nos ayudaron, especialmente a Lieven Taillie y su equipo de la sección belga.
Bajo mi presidencia organizamos un congreso de la AEJ en Neusiedl, Austria, en 2014, donde, junto con los relatos actualizados de la cooperación regional de los eurodiputados austriacos y húngaros, conocimos algunos detalles nuevos sobre los acontecimientos que se produjeron tras la caída del Telón de Acero, incluyendo quién organizó realmente el quizás crucial desencadenante del Picnic Paneuropeo de 1989 en la frontera austro-húngara.
El recién nombrado Comisario de la UE por Letonia, Valdis Dombrovskis, nos ofreció una útil visión interna de su responsabilidad sobre el euro como moneda y los servicios financieros. Desde entonces se ha convertido en un miembro influyente y eficaz del equipo de la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen.
En el memorable Congreso de la AEJ de 2016 en Kilkenny, el ministro de Asuntos Exteriores de Irlanda, Charles O’Flanagan, y la vicepresidenta del Parlamento Europeo, Mairead McGuinness, fueron algunos de los oradores destacados. El jefe de la recién creada EU East Stratcom Task Force, Giles Portman, describió cómo funcionaba la desinformación rusa dirigida contra la UE y cómo contrarrestarla.
En 2017 las Fake News fueron uno de los temas principales de nuestra Asamblea General en Vilna, la capital lituana. La periodista radiofónica búlgara Irina Nedeva, experta en este campo, fue elegida representante especial para la lucha contra las noticias falsas.
La siempre activa Sección Británica, bajo la dirección de William Horsley, organizó con motivo de nuestro 50 aniversario en 2018 un seminario muy oportuno e interesante en Londres, en vísperas de la fatídica votación del Brexit.
Por Otmar Lahodynsky
